¿Qué es la delincuencia?


¿Qué es la delincuencia?

¿Qué es la delincuencia?

La delincuencia es un fenómeno social que abarca una amplia gama de hechos o comportamientos delictivos (por definición ilegales) perpetrados por individuos o grupos de personas que violan las leyes y normas establecidas en una sociedad. En este artículo, exploraremos diferentes formas de delincuencia, desde la delincuencia organizada hasta la delincuencia cibernética, y analizaremos su impacto en la sociedad y las medidas que se toman para combatirlas.

La delincuencia se refiere a todas las actividades relacionadas con la comisión de delitos y a las personas que las llevan a cabo, conocidas como delincuentes. Un delito implica la realización de acciones contrarias a la ley y el derecho, y los delincuentes en teoría, son sancionados de acuerdo con el sistema de justicia de cada país, aunque sabemos que esto no siempre es así. Las penas aplicadas a los delincuentes varían según la gravedad de la infracción y buscan, idealmente, la reinserción social de los individuos una vez cumplida su condena, pero esto principio tampoco se logra la mayoría de las veces.


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El Estado y la lucha contra la delincuencia

El Estado tiene la responsabilidad de proteger a los ciudadanos contra la delincuencia. De hecho, este es su principal razón de ser, proteger a la sociedad y sus bienes, de todos aquellos y aquello que busque hacerle daño. Para lograrlo, se crean organismos de vigilancia, protección y control social, como la policía o diversas agencias especializadas, y se aplica la ley a través del sistema de justicia. Estas instituciones trabajan en conjunto para prevenir el delito, investigar los casos delictivos y llevar a los responsables ante la justicia. Sin embargo, esto no siempre se logra, por lo que la delincuencia sigue siendo una preocupación social en todo el mundo, y refleja tanto los problemas de falta de Estado de Derecho, como la desigualdad y exclusión que existen en las sociedades.


Delincuencia organizada: Estructuras criminales y sus actividades

La delincuencia organizada se refiere a grupos criminales estructurados, con jerarquías, roles y funciones específicas. Estas organizaciones tienen como objetivo principal obtener beneficios políticos y económicos a través de la comisión de delitos. A menudo, la delincuencia organizada alcanza niveles de sofisticación comparables a los de las empresas legales, lo que les permite evadir el control gubernamental y construir redes criminales internacionales. Los miembros de estas organizaciones a menudo están vinculados a grupos de poder, lo que dificulta su persecución por parte de la justicia.

La delincuencia organizada se involucra en actividades ilícitas como la trata de personas, el tráfico de armas, el tráfico de drogas, la falsificación y el blanqueo de capitales. Ejemplos notorios de delincuencia organizada son las mafias y los carteles. Al Capone en Estados Unidos y los carteles colombianos de drogas del siglo XX, así como los carteles mexicanos del siglo XXI, son ejemplos destacados de este tipo de organizaciones. Como respuesta mundial a esto, existe la Interpol, que es el organismo policial creado para combatir la delincuencia organizada a nivel internacional, aunque siempre depende la voluntad de las naciones para poder ejercer sus funciones.




Delincuencia común: Delitos individuales sin estructuras organizativas

La delincuencia común se refiere a la perpetración de delitos por parte de individuos o grupos sin una estructura organizativa formal. Estos delincuentes no son especializados y suelen cometer delitos menores o graves con el objetivo de obtener dinero o artículos de valor. Algunos ejemplos de delitos comunes son el robo simple, los asaltos, las estafas, el carterismo, las violaciones, el robo y hurto de vehículos, y el vandalismo.


Delincuencia urbana: El desafío de la seguridad en las ciudades

La delincuencia urbana se produce dentro de los núcleos poblacionales o ciudades. Las áreas urbanas, especialmente las grandes ciudades, concentran a una gran cantidad de personas debido a su poder económico y financiero, lo que también atrae a los delincuentes. Por esta razón, las grandes ciudades suelen enfrentar los principales problemas de seguridad, aunque también muchas veces, son las zonas de los países que mejor respuesta tienen ante este fenómeno, por sus mismas características de riqueza económica y financiera


La delincuencia juvenil: Una preocupación social

La delincuencia juvenil se refiere a la comisión de delitos por parte de personas menores de edad. Este tipo de delincuencia recibe un tratamiento específico por parte de los sistemas jurídicos de cada país y se implementan medidas especiales, como centros juveniles de detención, para abordar las necesidades y la rehabilitación de los jóvenes infractores. Es importante prestar atención a la delincuencia juvenil, ya que muchos delincuentes adultos comenzaron su carrera delictiva en la adolescencia.


Orígenes sociales de la delincuencia

Si bien este es un tema complicado que necesita un análisis mucho más profundo, no es posible dejar de notar que, en los países con economías avanzadas y estándares de atención social prioritarios, la delincuencia es mucho más baja que en países con economías pobres y con poco interés o recursos en atender la parte social de la población (educación, salud y seguridad). Entonces podemos notar que además de la falta de un Estado de Derecho pleno, la parte social también tiene un gran pesos en las naciones con problemas serios de delincuencia.

Sabemos que la delincuencia es un fenómeno complejo y multifactorial que tiene raíces en diversas causas sociales y que si bien es importante tener en cuenta que cada caso delictivo es único y puede estar influenciado por múltiples factores, existen algunas causas sociales comunes que se han identificado como contribuyentes a la aparición de la delincuencia. A continuación, exploraremos algunos de los principales orígenes y causas sociales de la delincuencia.

    Desigualdad socioeconómica: La desigualdad económica y social es un factor significativo que contribuye a la delincuencia. Las comunidades con altos niveles de desigualdad suelen experimentar tensiones sociales y económicas, falta de oportunidades y acceso limitado a recursos básicos. Esto puede generar frustración, alienación y desesperanza, llevando a algunos individuos a recurrir a actividades delictivas como una forma de obtener ganancias económicas o buscar un sentido de pertenencia.

    Exclusión social y marginalización: La exclusión social, la discriminación y la marginación de ciertos grupos de la sociedad pueden ser factores que contribuyen a la delincuencia. Cuando los individuos se sienten excluidos o no tienen oportunidades legítimas para participar en la sociedad, pueden recurrir a comportamientos delictivos como una forma de manifestar su ira, rebelión o descontento hacia el sistema.

    Desintegración familiar: La estructura familiar desintegrada o disfuncional puede tener un impacto significativo en la aparición de la delincuencia. La falta de apoyo, supervisión y orientación adecuados en el entorno familiar puede dejar a los jóvenes vulnerables y expuestos a influencias negativas de su entorno. La ausencia de figuras parentales estables y modelos positivos puede aumentar las posibilidades de que los jóvenes se involucren en actividades delictivas.

    Educación deficiente: La falta de acceso a una educación de calidad puede ser un factor subyacente en la delincuencia. La educación proporciona oportunidades para el desarrollo personal, el crecimiento intelectual y la adquisición de habilidades necesarias para una vida productiva. La falta de educación adecuada puede limitar las oportunidades laborales y económicas, lo que puede empujar a algunas personas hacia la delincuencia como una forma de supervivencia o búsqueda de recursos.

    Influencia de grupos pares y entorno social: La influencia de grupos pares y del entorno social también puede desempeñar un papel en la delincuencia. Las personas pueden verse influenciadas por sus compañeros y su entorno, especialmente cuando se encuentran en contextos donde las normas y los valores antisociales prevalecen. La presión de los grupos puede llevar a la participación en actividades delictivas como una forma de encajar, ganar aceptación o buscar una identidad.

    Por supuesto, que estas causas sociales no son determinantes absolutos de la delincuencia, y cada caso debe ser considerado en su contexto específico. Además, otros factores individuales, psicológicos y económicos también pueden interactuar y desempeñar un papel en la aparición de la delincuencia. Para abordar eficazmente la delincuencia, es crucial implementar estrategias integrales que aborden estas causas subyacentes y promuevan la equidad, el acceso a oportunidades y el bienestar social en las comunidades, no solamente la parte policial o de cumplimiento de la ley, de lo contrario será el cuento de nunca acabar y no habrá manera de frenar este cáncer social, que es la delincuencia.


    En conclusión, la delincuencia abarca una amplia gama de actividades delictivas y sus implicaciones son significativas en la sociedad. Desde la delincuencia organizada hasta la delincuencia cibernética, la delincuencia común, la delincuencia urbana y la delincuencia juvenil, cada forma de delito presenta desafíos únicos para la seguridad y el bienestar de las comunidades. La delincuencia puede tener varios orígenes, pero siempre encuentra un caldo de cultivo ideal en sociedades con mucha pobreza y desigualdad, por lo que la lucha contra la delincuencia requiere la colaboración y el esfuerzo conjunto de la sociedad, las instituciones gubernamentales y los organismos encargados de hacer cumplir la ley para crear entornos seguros y proteger los derechos de los ciudadanos, no solamente desde el punto de vista policial sino también social.




    Características de la delincuencia.

    • Contravención de la ley: La delincuencia implica la realización de acciones que van en contra de las leyes y regulaciones establecidas por una sociedad. Los delitos pueden variar en gravedad, desde delitos menores hasta delitos graves, pero todos implican necesariamente una violación de las normas legales.

    • Intención criminal: La delincuencia implica una intención criminal por parte del individuo o grupo que comete el delito. Esto significa que el acto delictivo es realizado conscientemente, con el propósito de obtener beneficios ilegales, causar daño o violar los derechos de otras personas.

    • Sanciones legales: La delincuencia conlleva sanciones legales impuestas por el sistema de justicia de cada país. Estas sanciones pueden incluir penas de prisión, multas, libertad condicional, rehabilitación, entre otras. Las penas varían en función de la gravedad del delito y las leyes vigentes en cada jurisdicción.

    • Daño a la sociedad: La delincuencia tiene un impacto negativo en la sociedad en general. Los actos delictivos pueden causar daño físico, emocional o económico a las personas afectadas, así como generar inseguridad, miedo y desconfianza en la comunidad. Además, la delincuencia puede socavar el tejido social y contribuir a la desigualdad y la exclusión.

    • Recurrencia: La delincuencia a menudo se caracteriza por un patrón de comportamiento repetitivo. Algunos individuos pueden convertirse en delincuentes habituales, cometiendo una serie de delitos a lo largo de su vida. La reincidencia es un desafío importante en el sistema de justicia, ya que implica la necesidad de abordar las causas subyacentes de la conducta delictiva y proporcionar oportunidades de rehabilitación.



    ¿Qué es la delincuencia?

    La delincuencia se refiere a todos lo actos ilegales cometidos por personas para obtener un beneficio.

    5 ejemplos de delincuencia.

    • Robo de una tienda: Un individuo entra en una tienda y sustrae productos sin pagar por ellos, infringiendo así la ley y cometiendo un acto de robo.

    • Grafiti ilegal: Una persona pinta grafitis en propiedades públicas o privadas sin autorización, dañando la propiedad y violando las regulaciones locales, lo cual constituye un acto de vandalismo.

    • Estafa telefónica: Una persona llama a individuos con el objetivo de engañarlos y obtener información personal o financiera para cometer fraudes, como el robo de identidad o el acceso a cuentas bancarias.

    • Violación de los derechos de autor: Una persona realiza copias y distribuye material protegido por derechos de autor, como música, películas o libros, sin tener los permisos correspondientes, violando así las leyes de propiedad intelectual.

    • Robo del presupuesto público: Un político, aprovechando su cargo, desvía fondos públicos para su propio beneficio, en violación flagrante de la ley.



    Para finalizar, basta recapitular que, la delincuencia es un fenómeno social que abarca una amplia gama de hechos o comportamientos delictivos (por definición ilegales) perpetrados por individuos o grupos de personas que violan las leyes y normas establecidas en una sociedad.

    ¿Qué es la delincuencia?

    Un ejemplo de la delincuencia, es el robo simple de objetos de valor o dinero.


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