El lenguaje es una herramienta fundamental de comunicación y, como tal, evoluciona a medida que la sociedad lo hace. Una de las formas en las que el lenguaje se adapta a las necesidades de la sociedad es a través de la incorporación de palabras de otros idiomas, lo que conocemos como extranjerismo.
El extranjerismo se refiere a aquellas palabras que provienen de otros idiomas y que son adoptadas por una lengua local para expresar un significado determinado. Estas palabras pueden tener diferentes orígenes y formas, y su incorporación a la lengua local puede ser producto de diferentes motivos.
Existen varios tipos de extranjerismos que pueden encontrarse en una lengua, y se pueden clasificar de diferentes maneras. Una forma de clasificar los extranjerismos es según su forma, que incluye el calco semántico, el préstamo semántico y el préstamo léxico.
El calco semántico ocurre cuando una palabra extranjera encuentra su equivalente en la lengua de origen, pero la palabra de origen se usa en relación a esta. Por ejemplo, la palabra mouse (procedente de la informática) y ratón. En este caso, la palabra en inglés "mouse" es traducida al español como "ratón", pero también se usa la palabra en inglés para referirse al dispositivo que se usa en los ordenadores.
El préstamo semántico consiste en atribuir a una palabra que ya existe en el idioma de origen un nuevo significado proveniente de otra lengua. Por ejemplo, romance, que en castellano originalmente hace referencia a las lenguas latinas (romanas), por influencia del inglés se le incorpora también el significado de "relación amorosa".
El préstamo léxico ocurre cuando hay un vacío en la lengua de origen y se toma un término de otra lengua, se adopta y se adapta. Por ejemplo, scanner y escáner, o stalking y estalkear o estalkeando.
Otra forma de clasificar los extranjerismos es según su origen, que se relaciona con la cultura o país foráneo de influencia. Los tipos de extranjerismos según su origen incluyen:
1.-Anglicismo: palabras que provienen de la lengua inglesa, como wifi, béisbol (baseball), e-mail, backstage, looser, garaje, entre otras.
2.-Galicismo: palabras que provienen de la lengua francesa, como boutique, carnet, chef, élite, debut, entre otras.
3.-Lusismo: términos y expresiones propios de la lengua portuguesa, como ananás, barullo, perca, menina, entre otros.
4.-Italianismo: palabras que provienen de la lengua italiana, como chao, gamba, ópera, ritardando, forte, adaggio, vendetta, entre otras.
5.-Cultismo o locuciones latinas: expresiones en latín puro, sin castellanizarlas, como grosso modo (de manera general o a grandes rasgos), modus operandi (procedimiento), per secula seculorum (por los siglos de los siglos), entre otras.
6.-Arabismo: palabras que tuvieron su origen en la lengua árabe, como ajedrez, albañil, albahaca, entre otras.
7.-Neologismo: palabras nuevas en el vocabulario de una lengua, que surgen en la medida en que aparecen las necesidades lingüísticas, como seropositivo, OVNI, pordiosero, rascacielos, bloguer, bitcoin, youtuber, selfie, nube, tuit, entre otras.
Es importante tener en cuenta que los extranjerismos pueden enriquecer y ampliar el vocabulario de una lengua, pero también es importante usarlos de manera adecuada y no abusar de ellos. Es recomendable buscar siempre alternativas en el propio idioma antes de recurrir a un extranjerismo, especialmente en contextos formales o académicos.
El uso de extranjerismos en el proceso de globalización tiene varios aspectos positivos. A continuación, se mencionan algunos de ellos:
Comunicación internacional: El uso de extranjerismos facilita la comunicación entre personas de diferentes países y culturas, ya que permite que se comprendan términos y conceptos que pueden no tener una traducción literal en el idioma local.
Acceso a la información: Al utilizar extranjerismos, se pueden entender textos y conceptos de diferentes campos del conocimiento que están disponibles en otros idiomas, lo que permite el acceso a información valiosa para el desarrollo de la educación, investigación y tecnología.
Intercambio cultural: El uso de extranjerismos también puede fomentar el intercambio cultural, ya que permite que se adopten palabras y expresiones de otras culturas, lo que puede enriquecer la propia lengua y la comprensión de otras culturas.
Expresión de la diversidad lingüística: El uso de extranjerismos también puede mostrar la diversidad lingüística y cultural, ya que permite que se reconozcan las influencias de otros idiomas y culturas en la propia lengua.
Facilitación del comercio internacional: el uso de extranjerismos también puede facilitar el comercio internacional, ya que permite que se utilicen términos estandarizados en diferentes idiomas para designar productos y servicios, lo que puede mejorar la eficiencia y reducir los costos de la comunicación y la traducción.
En resumen, el uso de extranjerismos en el proceso de globalización puede tener varios aspectos positivos, como facilitar la comunicación internacional, el acceso a la información, el intercambio cultural, la expresión de la diversidad lingüística y la facilitación del comercio internacional. Sin embargo, también es importante tener en cuenta que su uso debe ser equilibrado y estar regulado para evitar la pérdida de la identidad cultural y lingüística.
Variedad de orígenes: Los extranjerismos pueden tener orígenes muy diversos, desde el inglés y el francés hasta el árabe o el portugués, entre otros.
Adaptación a la lengua local: Aunque los extranjerismos provienen de otras lenguas, su incorporación a la lengua local implica una adaptación para que se ajusten a las reglas gramaticales y fonéticas de esa lengua.
Influencia cultural: La presencia de extranjerismos en una lengua puede reflejar la influencia cultural de otros países o culturas sobre la sociedad que adopta esos términos.
Cambio en el significado: Los extranjerismos pueden cambiar su significado original al ser adoptados por otra lengua. Por ejemplo, la palabra "romance" en español originalmente se refería a las lenguas latinas, pero por influencia del inglés, también se utiliza para referirse a una relación amorosa.
Continua evolución: El uso de extranjerismos es un fenómeno en constante evolución, ya que la sociedad sigue cambiando y generando nuevas necesidades lingüísticas que requieren la incorporación de nuevos términos.
        El extranjerismo son palabras que provienen de otros idiomas y que son adoptadas por una lengua local.
Anglicismo: Wifi, béisbol, email, backstage, looser, garaje, etc.
Galicismo: Boutique, carnet, chef, élite, debut.
Arabismo: Ajedrez, albañil, albahaca, etc.
Lusismo: Ananás, barullo, perca, menina, etc.
Italianismo: Chao, gamba, ópera, ritardando, forte, adaggio, vendetta.
Para finalizar, basta recapitular que, el extranjerismo se refiere a aquellas palabras que provienen de otros idiomas y que son adoptadas por una lengua local para expresar un significado determinado. Estas palabras pueden tener diferentes orígenes y formas, y su incorporación a la lengua local puede ser producto de diferentes motivos. Además, el extranjerismo es un fenómeno lingüístico que refleja la influencia de otras culturas y sociedades en nuestra lengua. Su incorporación es una muestra de la capacidad de adaptación y evolución del lenguaje, y su presencia es una manifestación de la diversidad cultural que nos rodea. Es importante tener en cuenta que, aunque los extranjerismos pueden enriquecer nuestra lengua, también es necesario mantener un equilibrio para no desplazar a los términos locales y mantener la riqueza y variedad de nuestra lengua.
        La extranjerismos pueden ser muy útiles en el contexto de la globalización.
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